Mostrando entradas con la etiqueta LACTANCIA. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta LACTANCIA. Mostrar todas las entradas

2 de octubre de 2013

13 cosas sobre la lactancia (o dar el chucho)


Quisiera poner aquí a modo de las famosas listas de revistas, cosas que quiero contarles sobre la lactancia, cosas que yo no sabía y que cambiaron mi forma de pensar sobre lo que como decimos en Ecuador, es dar el chuchito:

1. Los primeros días de lactancia de una mamá primeriza son locos, no sabes qué posición ponerte, te duele la espalda, no sale leche, el bebé no sabe cogerse bien del pezón. Ayau.

2. Es mentira que puedes tener poca leche, todo se trata de oferta y demanda, mientras más tiempo le des el chucho a tu guagua, más leche tendrás, si vas completando con fórmula tendrás cada vez menos y se formará un círculo vicioso.

3. El chucho no sólo proporciona alimento, sino tranquiliza y acuna al bebé, por lo que uno piensa, ¿por qué está todo el rato pegado al chucho? ¿sigue con hambre? ¿qué estoy haciendo mal? ninguna, los primeros meses tu bebé puede pasar perfectamente pegado a ti hora tras hora.

1 de octubre de 2013

año dos meses


La mejor edad del mundo. Tal vez luego volveré a decir esto, o tal vez no. Pero el Matías habla en lenguas extrañas y aprendió a buscar la luna. Le digo que me abrace y pone su cara sobre mi hombro. Le gustan los buses, viajamos siempre y él va parado en el asiento sonriendo a los demás. Le hago cosquillas mientras le doy chuchito y no sabe si reír o succionar. Se ha vuelto un poco insoportable y obsesivo con ver videos de canciones en youtube. Busca por la ventana cuando ladra un perro y se alza buscando un avión.

Es impresionante como ese pequeño animal que es mi hijo, va haciéndose un ser humano, es increíble ver su risa, se ríe abiertamente cerrando sus ojos, y yo que siempre he sido una persona dramática, que he luchado contra mi tristeza y que he llevado el pesimismo de mi generación impregnada en la ropa me dejo llevar por las palabras más cursis del planeta: mi cholito, chiquito precioso, mi corazón, mi amor, mi guapura pequeña, mi locura chiquita; y sonrío.


A veces me acuerdo del proceso de separación que llevo ahorita con el papá del Matías y me pongo un poco melancólica, el Matías siente esa angustia y se pone molestoso, son momentos difíciles, que me sobrepasan, y es ahí cuando pienso, que ese pequeño loco que ahora ya tiene un año dos meses salvó mi vida.

13 de agosto de 2013

un año


El Matías acaba de cumplir un año, hace un año entré a la clínica con tanto miedo, que no pude afrontar dar a luz normalmente, siempre he sido miedosa, así que no pude asumir el reto, claro, mi ginecólogo dijo que tenía que ser cesárea (anotando la cesárea en la agenda coordinando con las demás cirugías como actualmente se hace) porque me decía que el matías no encajaba su cabeza, yo no tenía mucha información, y me avergüenza decirlo porque a mis treinta años no me había empoderado nada sobre el parto y la maternidad, no sé, creí que iba a ser algo diferente, o solamente escuchaba el otro lado, en el que uno piensa que con el cuarto del bebé y el moisés está casi todo listo, te preocupas por los pañales, te emocionas comprando ropita, preparando el cuarto, los muñequitos, te anticipas preguntando por los coches y la silla de comer, en fin.